1.2 Tres estilos de hacer escuela

El artículo que se nos presenta se hace una clasificación de los tres estilos de hacer escuelas. Podemos encontrar el estilo técnico, éste parece ser que es el más fácil de llevar a cabo y el que menos trabajo conlleva al docente. ¿Por qué? Los maestros que siguen este modo de enseñanza tan sólo se rigen por lo que les dicen, es un mero mandado. Suele darse este tipo de estilo cuando el docente por miedo a meter la pata o por cualquier otro motivo no es capaz de tomar las riendas de su enseñanza, así que si se presentase algún problema tendría la conciencia tranquila, ya que no ha sido culpa suya, sino de los “superiores”. Digo superiores porque en este estilo se realiza una jerarquización, donde el maestro seria el último escalón.

Lo que respecta a mi punto de vista, este es un estilo para aquellas personas que ejercen su docencia sin vocación, sin gustar y adorar su trabajo, ya que si mostraran verdadero interés, pondrían bastante de su parte para cambiar, innovar, pero claro eso supone un esfuerzo al que no están dispuesto ejercer. Es muy fácil llevar a una clase, seguir el programa a rajatabla y limpiarse las manos en caso de algún problema (no es su culpa, sino la de otros), sólo importa que alcances los objetivos, pero no como llegar a alcanzarlos. Creo que es el estilo que más se lleva actualmente, aunque poco a poco se esté intentando cambiar e innovar, pero aun queda muchisimo por hacer.

Sin embargo, podemos encontrar el estilo práctico, totalmente diferente al anterior. Aquí si que importa el cómo, por qué y el para qué. Los docentes que llevan a cabo este estilo de enseñanzas procuran contextualizar, dialogar y por supuesto entienden el curriculum como guia, y no como estructura rígida. Van más allá de los libros de textos, que sí, que lo podrán tener de apoyo, pero no se basarán sólo en eso. Buscan otros recursos, innovan. Creo que un docente con este estilo, podrá sentirse orgulloso de su actividad docente, aunque también encuentro algún inconveniente, sólo le importa la realidad de su aula, no mira más allá. Él tiene su clase muy bien llevada, y lo que respecta a lo demás no le importa. Pienso que es una actitud algo egoista y que deberá cambiar, ayudar y aportar también a su alrededor, para que la situación se extendiese a toda la comunidad educativa.

A diferencia del estilo práctico, el estilo crítico pretende integrar a toda la comunidad. Reivindican un cambio, pero en el que participen todos, hay mayor motivación por parte de los alumnos. Da mucha importancia a la interacción social y al conocimiento compartido (participación y diálogo). Otro cosa que no hace pensar esta teoría es que criticar es muy fácil, pero lo difícil es mejorar las cosas. Así que habrá que ir más allá de las críticas y mejorar las cosas verdaremente.